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EL GRANO DE ARENA Correo de informaci?n ATTAC nー98 Miercoles, 25/07/2001 ______________________________ Suscriptores: 4 463 Gracias por hacer circular y difundir esta informaci?n. Para suscribirse o desuscribirse http://attac.org/listes.htm Este correo informativo ha sido elaborado por el equipo de colaboradores espont疣eos de "El Grano de Arena". informativo@attac.org RTF : http://attac.org/attacinfoes/attacinfo98.zip PDF : http://attac.org/attacinfoes/attacinfo98.pdf ____________________________________________________________ En este n?mero. S?ntesis 1. Cruzada en defensa de las naciones pobres: Frei Beto se?ala desde G駭ova dos aspectos muy importantes: el apoyo de la Iglesia a la anulaci?n de la deuda y los antecedentes hist?ricos de las anulaciones en el marco de las movilizaciones de G駭ova. 2. G駭ova: peque?a cr?nica. La situaci?n en G駭ova es tranquiila a pesar de algunos hechos a modo de advertencia. El gobierno italiano hace lo posible por recalentar los esp?ritus y provocar incidentes. A pesar de todo el Forum acaba de iniciarse. 3. Okinawa-G駭ova: ソun a?o para nada?: La experiencia de la Dot Force demuestra que no es suficiente ser invitado a una mesa de discusi?n para ser escuchado y entrar en un proceso de democracia participativa. Hace falta inventar todav?a las condiciones democr疸icas de esta clase de di疝ogo. 4. G駭ova y las m?ltiples crisis de la globalizaci?n: He aqu? una contribuci?n al Foro social de G駭ova. La crisis del sistema no conducir? necesariamente a su reemplazo por un sistema m疽 benevolente con las relaciones internacionales. Como lo predijo Rosa de Luxemburgo antes del ascenso del fascismo a comienzos del siglo XX en una Europa en crisis, el resultado puede ser la "barbarie" en la que los ideales y los temas de la oposici?n progresista son pirateados y pervertidos por las fuerzas demag?gicas hostiles a la libertad, la legalidad y la democracia 5. Noticias breves. Cambio clim疸ico y ajustes ソdos caras de la misma moneda? ______________________________ 1. Cruzada en defensa de las naciones pobres ____________________________________________________________ Frei Betto, G駭ova ソQui駭 dir?a? El gran l?der anti-G8 no vendr? a G駭ova y, sin embargo, moviliza aqu? cerca de 5 mil j?venes, venidos de todas las regiones del pa?s: el Papa Juan Pablo II. Sus pupilos son tratados por los medios italianos como "Papa boy's", afiliados a sesenta asociaciones cat?licas. El l?der local es el Cardenal Tettamanzi, de radiante simpat?a. Su mayor bendici?n a los manifestantes consisti? en declarar a un p?blico de 2 mil j?venes que "un ni?o africano con Sida vale m疽 que el Universo entero". Mensaje directo a los jefes de Estado y de Gobierno que llegar疣 a su arquidi?cesis el 20 de julio. Uno de los temas de la agenda del G-8 es la mortandad que el Sida provoca en Africa, donde los laboratorios se niegan a proveer medicamentos a bajo costo. Los "Papa boy's" ocupan los teatros de G駭ova por la ma?ana; en la tarde se distribuyen en cuatro iglesias, donde debaten temas sociales, como deuda externa y pobreza del tercer mundo; y a la noche, en el parque dell'Acquasola, cantan delante del monumento del soldado desconocido. "Ciudad blindada" G駭ova se transform? en una "ciudad blindada". El aeropuerto estar? cerrado entre el 19 y el 22. El puerto cierra un d?a antes, pues Bush y Chirac se hospedaran en portaaviones. El palacio Ducal, donde se desarrollar疣 las reuniones del G-8, es el epicentro de la "zona roja" -cuatro kil?metros cuadrados de acceso restringido, seg?n las autoridades, ソser?? Ya fueron distribuidas, por las calles de la ciudad, copias de las credenciales de acceso. La ?nica diferencia con el original es que, en lugar de "fac-simile", los autores del ap?crifo imprimieron "funk-simile". Hay quien garantiza que la CIA bloquear? todos los celulares dentro de la "zona roja" para evitar el riesgo de accionar una bomba. El gobierno italiano promete monitorear, por sat駘ite, todas las comunicaciones electr?nicas durante el G-8. Y envi? a la ciudad m疽 de 20 mil polic?as, sin contar con la seguridad, casi toda secreta, de cada uno de los ocho se?ores que concentran en sus manos el poder mundial. La fuerzas de seguridad temen, en espacial, a los manifestantes ingleses, espa?oles y alemanes, considerados violentos Deuda externa Creyentes y ateos quieren hacer resonar al llamado del Papa del domingo 8: "Escuchen el grito de los pa?ses pobres". El tema de la deuda externa consta en la agenda del G-8 y centra la atenci?n de los manifestantes. Para los adeptos de la campa?a mundial por la anulaci?n de la deuda de las naciones m疽 pobres del mundo, lanzada en el 2000 por el Vaticano, la propuesta nada tiene de absurda y, mucho menos, de original. En el siglo 18, los Estados Unidos anularon sus deudas con la Corona Brit疣ica, as? como, en 1991, Polonia cancel? el pago de parte de su deuda externa. Ni por eso ces? el flujo de financiamiento externo privado para aquellos pa?ses. La anulaci?n del 51% de la deuda externa de Alemania, en 1953, propici? el crecimiento econ?mico del pa?s, como ya ocurri? en Rusia en 1918. Seg?n la ONU, en 1999 los 48 pa?ses m疽 pobres del mundo, con 600 millones de personas, solo recibieron 0,5% de las inversiones directas extranjeras. M疽 de la mitad de aquellas inversiones privilegi? apenas cuatro pa?ses: Brasil, China, M騙ico y Tailandia. El dinero, empero, no entr? gratuitamente, pues el 80% del monto sirvi? para la adquisici?n de empresas locales, que pasaron al control de conglomerados transnacionales, reduciendo los puestos de trabajo y, adem疽, la soberan?a nacional. Una tema tratado en los debates de G駭ova concierne al Brasil: la legitimidad de la deuda contra?da bajo la dictadura militar. En opini?n de algunos entendidos, ella es jur?dicamente ileg?tima, seg?n precedentes hist?ricos. Al final del siglo 19, los Estados Unidos asumieron el control de Cuba, despu駸 de la guerra que llev? a la isla del caribe a conquistar su independencia de Espa?a. Madrid exigi? que la deuda cubana con la Corona espa?ola fuese asumida por los Estados Unidos. Washington puso o?dos sordos y calific? el peso de la deuda como yugo impuesto al pueblo cubano. La comisi?n estadounidense encargada del caso aleg? que la deuda hab?a sido creada por el gobierno espa?ol para su propio beneficio, y que los acreedores aceptaron el riesgo de las inversiones. En los a?os 30, la Corte de Arbitraje Internacional, de la cual participaba el juez Traft, presidente de la Corte Supremas de los Estados Unidos, admiti? que eran nulos los pr駸tamos concedidos al presidente Tinoco, de Costa Rica, por un banco brit疣ico establecido en Canad?. El argumento fue que el dinero no servia a los intereses del pa?s, pero s? a los privilegios de un gobierno no democr疸ico. El juez Traft declar?: "El Royal Bank deber?a probar que el dinero fue prestado al gobierno para usos leg?timos. El banco no lo hizo". Eso se repiti? en Filipinas en 1986, luego de la ca?da del dictador Marcos; en Ruanda, en 1994; en Sud畴rica, tras el fin del apartheid; en la Rep?blica Democr疸ica del Congo en 1997, despu駸 de la ca?da de Mobutu; en Indonesia, en 1998, luego de la salida de Suharto, etc. Los grandes bancos europeos y estadounidenses son denunciados aqu? como c?mplices de la extorsi?n provocada por dictadores sobre los pueblos que gobernaban. Mobutu recaud? una fortuna casi diez veces superior al PIB de su pa?s. Nigeria posiblemente estar?a menos pobre si los bancos le restituyeran a ella los tesoros robados por el dictador Abacha. Lo curioso es que todo ese discurso contrario al actual modelo de globalizaci?n no suena como un clich? de izquierda. Y nadie siquiera menciona el fantasma del comunismo. Respaldado por el Papa, resuena como un llamado 騁ico, lo que obliga a los poderosos socios del G-8 a por lo menos demostrar que tienen un poco de sensibilidad ante del clamor de los pobres. Servicio Informativo "Alai-amlatina" Agencia Latinoamericana de Informaci?n info@alai.ecuanex.net.ec URL: http://alainet.org ______________________________ 2. G駭ova - Peque?a cr?nica ____________________________________________________________ Laurent J駸over (14/07/01) En los alrededores de la Plaza Palermo, en donde hemos instalado las oficinas de ATTAC, est疣 llenos de peque?os negocios, un mercado municipal ( especial para comprar fruta), de vida de barrio. Resulta dif?cil, con apenas dos o tres palabras de italiano, discutir con la gente. Pero existen los caf駸, uno por la ma?ana para el "espresso" y el de la tarde sobre una peque?a terraza bajo los 疵boles, pr?xima a un jard?n. All? es m疽 f當il entenderse en ita?ol, especie de lengua latinizante de or?genes poco claros. Podemos finalmente explicar que somos ATTAC y que estamos all? por el G8. Lo que m疽 perturba entonces es la sonrisa del camarero o del barman, de la se?ora que atiende la caja, de las personas que nos rodean. A nosotros tampoco nos gusta el G8. Estamos de acuerdo, contin?en. Cuando Seattle yo no conoc?a a estos grandes fulanos pero ahora comienzo a comprender. Los gobiernos no cumplen con su trabajo, no debiera ser necesario andar as? por las calles. Los gobiernos deber?an hablar y discutir y organizar la democracia alrededor de una mesa como gente civilizada. Pues justamente el gobierno italiano ha tomado el viernes dos pesadas decisiones de negativas consecuencias. Dos decisiones que muestran una vez m疽 que se ha elegido la t當tica de la fortaleza, de la sordera y de la mala voluntad. Dos decisiones imb馗iles, es necesario decirlo, que muestran la ceguera de las democracias: solo los grandes pueden hablar en el m疽 completo aislamiento. La primera tiene que ver con las fronteras italianas: a partir del s畸ado 14 han sido suspendidos los acuerdos de Schengen. Esto significa puntillosa verificaci?n de papeles y posibilidad de interceptar la entrada de los indeseables. ソCu疝es? Nadie verdaderamente lo sabe. La segunda se refiere a las estaciones de ferrocarril: se cerrar? especialmente Brignole. Una vez m疽 es necesario no hundirse en el derrotismo paranoico. Contamos con recursos. El primero es que tenemos organizadas todas las fronteras, el 疵ea de la autopista de Beausoleil en el sur, como centro de convergencia antes de llegar a la frontera de Ventimiglia y equipos de abogados, de centros sociales italianos en otros pasos. Y adem疽 record駑osla historia: no hace demasiado tiempo los italianos para huir del fascismo recurr?an a caminos monta?eses. Los caminos existen a?n y tambi駭 la monta?a. El mar es grande y tambi駭 lo son las playas, en ellas se desembarc? una vez m疽 contra el fascismo. Basta para mostrar la total estupidez de estas decisiones que en modo alguno impedir疣 entrar a quienes est疣 extremadamente bien organizados. Y sin embargo talvez no haya quedado claro que el 90% de los manifestantes ser疣 italianos Pero talvez lo que se quiera es poner el toque de queda y el estado de emergencia. Es evidente que la primera "reflexi?n" de las autoridades italianas haya sido : son los extranjeros los que quieren introducir el desorden, de modo que cerraremos. Cierre nom疽 se?or Berlusconi, que esto no impedir? nada. Talvez nos incomode un poco, talvez demandar? un poco m疽 de tiempo, crear? dificultades a las personas honestas, en s?ntesis a todos nosotros, a quienes queremos ejercitar nuestro derecho a hablar y a circular en esta Europa de la que se nos dice ser el coraz?n del desarrolllo y de la democracia del mundo. Apostamos a que, como en la frontera de Qu饕ec cuando el gobierno canadiense la cerr? cuando se realiz? la Cumbre de las Am駻icas, los semiremolques y los camiones con mercader?a pasar疣 sin problemas mientras que los autobuses y los coches ser疣 presionados y las personas pasar疣 horas esperando que los aduaneros hagan su trabajo. Cierre, nosotros no forzaremos el paso. Reclamaremos simplemente que nos dejen ejercer los derechos que seg?n se dice nos asisten. Boat people (16/07/01) De repente nos dimos cuenta que hab?amos empujado hacia el puerto, casi al mar. Los jefes de Estado se han refugiado en las proximidades de un barco, una especie de "boat people" de un nuevo tipo, con el rimbombante nombre de Visi?n europea. Es como para decirles compasivamente ソadonde se refugiar疣 la pr?xima vez? ソQue puerto les dar? cobijo? La Cumbre se ha transformado en una ratonera en la cual se van a api?ar miles de personas cuya grandeza es apenas un triste velo sobre su pobre situaci?n. Berlusconi se venga mezquinamente. Su t當tica es tratar de crear la mayor cantidad de obst當ulos posibles a la llegada de la gente. Y va a?n m疽 lejos tentando difundir a trav駸 de los medios que existen diferencias y contradicciones en nuestro movimiento. Pero de todas maneras G駭ova es una ciudad abierta porque 駘 no tiene poder para cerrarla. G駭ova ya est? acogiendo a varios miles de militantes que han venido a trabajar, intercambiar ideas, discutir, escuchar, hablar, organizar las protestas para mostrarle nuestra decisi?n. Esta victoria en marcha, est? en la calma y la paciencia de las personas que sufren los retrasos y las esperas, las largas verificaciones de identidad, los viajes dif?ciles. La verdadera victoria la construiremos entre todos llegando a G駭ova. Cada d?a llega m疽 gente. Suceden hechos extra?os, un gendarme recibe una carta-trampa, un herido. Lo mismo sucede algunas horas m疽 tarde en el centro de Italia. Luego se descubren bombas falsas delante de un asociaci?n ecologista y en uno de los camping donde se alojan los Tute Bianche. Est? claro que lo que se busca es hacer subir la presi?n. Pero justamente esta presi?n no se percibe eb el Forum que ha comenzado en reuniones, en manifestaciones. La respuesta oficial ha sido tranquila y firme. Los esp?ritus no se alteran. Por el contrario trabajan. En la frontera, especialmente en Ventimiglia, los coordinadores y los voluntarios se ponen de acuerdo y progresan. El centro de convergencia en Beausoleil se abrir? el d?a 17 a partir de las 17 horas sobre la autopista A8 antes de la frontera italiana. Los diputados nacionales italianos se han movilizado para instalarse en los puntos de paso. Est? todo listo para acoger, explicar, informar y sobre todo para lograr que seamos innumerables en G駭ova, porque nuestra cantidad, en este caso ser? una victoria suplementaria. Y ma?ana, v?speras de la implantaci?n de la zona roja, la ciudad de G駭ova ver? un partido de f?tbol organizado por ATTAC en la Plaza Fontane Marose ( en plena zona roja un poco m疽 tarde) a las 20 hs. Dos equipos mixtos y sus apoyos intentar疣 revertir la historia y volv er a jugar el partido de la copa del Mundo Francia- Italia. Pero de lo que se trata tambi駭 es de demostrar con esta fiesta que la ciudad pertenece a qui駭es la ocupan y de los que desean organizar actividades constructivas, imaginativas, respetuosas de las libertades de todos y cada uno. La m?sica formar? parte y m疽 que las naciones, jugadores y jugadoras, voluntarios y todos los que quieran participar. Se ha sabido que tres jugadores profesionales quieren venir a jugar con nosotros. Se espera con ans?as el resultado del partido y los pron?sticos van por buen camino. Una cosa es cierta, no ser? la polic?a qui駭 gane porque tambi駭 ella ser? bienvenida a integrarse a uno u otro de los equipos. Luego esta noche luego de una jornada de encuentros, reuniones y debates hablaremos de estrategias. Pero como puede comprobarse en el coraz?n del GFS , como en las diferentes reuniones se trata de estrategias que construiremos juntos con el objeto de poder expresar mejor nuestros sentimientos y avanzar con nuestras diferencia y a pesar de algunos actos violentos como el del grupo de Tur?n que llegando a la estaci?n comenz? a atacar a la estaci?n. Laurent J駸over, redactor, journal@attac.org ______________________________ 3. Fractura num駻ica: Okinawa-G駭ova: ソun a?o para nada? ____________________________________________________________ Valerie Peugeot En julio de 2000, el G8 reunido en Okinawa daba el puntapi? inicial a una pol?tica destinada a encarar el riesgo de la "fractura num駻ica" entre los pa?ses del Norte y los pa?ses del Sur. Originaba esta iniciativa un doble an疝isis por parte de los 8 gobiernos: las Tecnolog?as de la informaci?n y de la comunicaci?n, a medida que se difunden en los pa?ses occidentales corren el riesgo de constituir un nuevo factor de desigualdad entre los pa?ses del Norte y del Sur. Inversamente bien utilizadas pueden constituir un factor de crecimiento econ?mico y de desarrollo. En relaci?n a esto el G8 decidi? constituir el DOT fuerza - digital observatory task force - encargado de formular una serie de propuestas destinadas a luchar contra esa famosa fractura. Tres particularidades reun?a esta estructura consultiva: su duraci?n ilimitada se detuvo en mayo ?ltimo con el env?o de un informe a los "sherpas" del G8; una mesa cuatripartita, ya que cada a?s estana representado por su gobierno, una empresa y un actor no lucrativo, a la que se agregaban una cantidad de organizaciones internacionales, desde la OCDE a la UIT (Uni?n Internacional de las Telecomunicaciones) pasando por la Uni?n europea y el PNUD; una apertura hacia los pa?ses del Sur, puesto que una decena de pa?ses entre los m疽 avanzados en (materia de apropiaci?n de los TIC, estaban invitados. (Brasil, Senegal, Sud畴rica. India, etc). La Dot Force trabaj? durante siete meses, llegando a producir un informe con siete puntos de contenido. El resultado de dicho trabajo ser? objeto en G駭ova de un comunicado de una veintena de l?neas, sumergido entre otros puntos del Orden del D?a, dejando para m疽 adelante el compromiso concreto de los estados. M疽 all? de este comunicado lac?nico y reducido por naturaleza, el proceso que lleva a cabo la Dor Force plantea cuestiones en serie que no puede menos que llamar la atenci?n a todos los que reflexionan y militan alrededor de los desaf?os de la apropiaci?n social de las tecnolog?as de la informaci?n como tambi駭 sobre la mundializaci?n y el gobierno internacional. La primera cuesti?n es la relacionada con la legitimidad ソ porqu? el G8 ha creado su propia Task force para encarar los desaf?os de la fractura num駻ica, cuando la UIT, agencia de las Naciones Unidas con vocaci?n por encarar estos desaf?os y la ONU ya lo han hecho (lo que refleja las rivalidades que reinan en la familia de la ONU) . Como de costumbre las negociaciones se realizan en un c?rculo restringido y occidental, en el que los pa?ses del Sur apenas tienen un banquito. Nos responden, por eficacia, el papel del G8 se limita a impulsar y no a negociar. ソEficacia? ソCu疝 es el peso de las propuestas sin ning?n firme compromiso financiero o pol?tico detr疽? Finalmente , aunque el informe preconizaba una metodolog?a de trabajo sobre referencias geogr畴icas m?ltiples y din疥icas, cada estado retorna a su pesadez presupuestaria y a sus zonas de influencia diplom疸ica. De tal modo que Canad?, en ocasi?n de la Cumbre de las Am駻icas anunci? el lanzamiento de un instituto para la conectividad de las Am駻icas dotado de un fondo de 20 millones de d?lares para su primer a?o de funcionamiento. Y sin duda Francia se volver? hacia el Africa franc?fona, etc. El segundo gran planteo es el del imaginario pol?tico ソCu疝 puede ser la capacidad innovativa de un ?rgano aunque sea rico y diversificado en su composici?n que navega en un marco ideol?gico predefinido en el que el bienestar de la humanidad rima con el crecimiento econ?mico y la libertad de comercio? Un pensamiento tan interiorizado tanto entre el conjunto de participantes del Norte como del Sur, p?blicos como privados o sin fines de lucro, solo conduce a una autocensura colectiva. El resultado es un magn?fico y a la vez terrible informe. Magn?fico porque contiene verdaderos avances sobre temas considerados estrat馮icos por los actores asociativos que trabajan sobre los desaf?os del desarrollo y de las tecnolog?as de la informaci?n. A modo de ejemplo, las propuestas sobre la diversidad ling??stica y cultural, sobre la libertad de los ordenadores, sobre los puntos de acceso asociados a Internet, sobre la combinaci?n de medios tradicionales y nuevos medios, sobre la formaci?n Sur-sur y no ?nicamente Norte-Sur, sobre lo indisociable de la conectividad y la formaci?n, son los reclamos de largo plazo de las asociaciones. Otro punto importante se refiere a la reivindicaci?n de asociar sistem疸icamente a los pa?ses del Sur a toda negociaci?n sobre los TIC, con los medios materiales que ello implica. 。No es esta la menor de las buenas sorpresas que una instancia nacida del G8 llega a la conclusi?n de que no hay nada que negociar en materia de informaci?n con los pa?ses del Sur! Y terrible porque lo esencial est? ausente. Algo esencial que contiene dos ideas tab? en la mesa de la Dot Force: la del servicio p?blico y la impositiva. ソComo lograr que las redes lleguen hasta los m疽 aislados y los m疽 desprovistos cuando los operadores de cable no est疣 sometidos a ninguna exigencia de conformar un servicio p?blico? Solo una de dos : o se considera que las redes son solo una especie de lujo, reservado a una 駘ite y en consecuencia el problema de la fractura num駻ica no existe. O se cree que la entrada en la sociedad de la informaci?n debe abrirse a todos, que el acceso a la informaci?n y la creaci?n de contenidos e las redes constituyen nuevos derechos, que la informaci?n es un bien com?n de la humanidad, por la que debe implementarse una verdadera pol?tica de servicio p?blico tanto en el Norte como en el Sur. Entend疥onos, no se trata de exigir a los operadores de cable conectar hasta el m疽 insignificante villorrio. Pero s? simplemente de pedir que el despliegue de infraestructuras, cuando se realizan de l?gicas puramente mercantiles, en funci?n de potenciales ganancias, sea acompa?ado de obligaciones tales como la de ofrecer accesos a precios razonables, no discriminatorios, cont?nuo en t馗nicas de comunicaci?n ( tel馭ono, red, correo electr?nico) o el acceso en condiciones privilegiadas a puntos TIC de acceso p?blico o comunitario. (a trav駸 de escuelas, asociaciones, actores de la econom?a informal) O mejor a?n solicitar a los poderes p?blicos, el que consideren como bienes p?blicos y por lo tanto gratuitamente accesibles cierta cantidad de conocimientos, de ?tiles, de informaciones. Los t駻minos "servicio universal" - versi?n edulcorada y Maastrichniana de servicio p?blico - terminaron por aparecer en el informe de la Dot Force, sin que contenga una sola l?nea sobre la manera de poner en marcha lo que apenas aparece como un indefinido horizonte. Tampoco ha merecido ser citados los aspectos impositivos, ni siquiera en versi?n "soft". Palabras a todos prohibidas en las tierras del liberalismo, aunque sin embargo pareciera ser la clave de una verdadera pol?tica de solidaridad redistributiva (otras dos palabras ignoradas en el informe) en materia de TIC. No faltan las ideas: comenzando por medidas seriadas, tales como la devoluci?n de una parte de las ventas de las nuevas generaciones tecnol?gicas destinado a la creaci?n de un fondo de lucha contra la fractura num駻ica que ser?a de f當il instalaci?n y no requiere negociaciones multilaterales, prueba de ello es que el anterior gobierno italiano lo hab?a experimentado. Lo que debe imaginar se es una pol?tica impositiva global a m疽 largo plazo: si el cobro de impuestos a los flujos de informaci?n pareciera tener que descartarse, porque desfavorecer?a a los "info-pobres", a quienes les resulta ya dif?cil hacerse escuchar y proteger su cultura en el ciberespacio, existen otras medidas a ser encaradas comenzando por aplicar impuestos a los nombres de dominio o a la net- econom?a, con vuelco del producido a ese mismo fondo de solidaridad num駻ica. Finalmente y este puede ser el aspecto m疽 importante que plantea la Dor Force para el largo plazo, la misma composici?n de esta instancia plantea la evoluci?n de nuestras formas de gobierno. En efecto el G8, probablemente d饕ilmente traumatizado por el fracaso de Seattle ha cuidado convocar al sector "no lucrativo" a la Dot Force. ソExiste voluntad de matar el germen de una protesta previsible o la de establecer un di疝ogo de tres interlocutores (privado, p?blico y "no lucrativo")? La elecci?n de los actores "no lucrativos" tiene m疽 significado que cualquier otro an疝isis. Cuando el gobierno alem疣 eligi? hacerse representar por una universidad especializada en los problemas del desarrollo, Canad? escogi? al IDRC, organismo de desarrollo Norte-Sur y los EEUU la Fundaci?n Markle, una importante fundaci?n especializada en los TIC, afin al precedente gobierno de Clinton. En los tres casos se trata de organismos de indiscutida competencia en los problemas tratados; Pero ソ es posible hablar de verdadera representaci?n del independiente tercer sector? Solo Inglaterra y Francia invitaron a una gran cantidad de ONGs en el primer caso y una asociaci?n en el segundo. En ning?n pa?s, las redes ciudadanas de Internet tuvieron la posibilidad de elegir un representante considerado leg?timo. Ahora bien la sociedad civil constituye una minor?a activa. Su peso se mide con la vara del impacto de su acci?n en el terreno y por su capacidad de movilizar a la opini?n p?blica para establecer relaciones de fuerza con los sectores comerciales y p?blicos. La historia de las redes ciudadanas de Internet son muy recientes para que existan formas de representaci?n nacionales o internacionales reconocidas por los actores de la sociedad civil y capaz de negociar con las instituciones p?blicas. Este proceso es objeto de debates en el seno de la sociedad civil tanto sobre sus formas como por su fondo (ソel porqu??). M疽 all? de la cuesti?n de la elecci?n de actores, se halla en consideraci?n el principio mismo de participaci?n. Algunos se oponen considerando que el di疝ogo multisectorial revela el adormecimiento social y consideran que el papel del tercer sector debe mantenerse en primer lugar en la resistencia. Otros lo defienden por cl疽icas razones de eficacia, estimando que constituye a?n la mejor manera de influir en el curso de las cosas. Otra forma de encarar esto consiste en aceptar participar, sin ingenuidad, en espacios mixtos por razones pol?ticas: en momentos en que se produce un des-compromiso generalizado del poder p?blico, la respuesta del liberalismo transita por una responsabilizaci?n creciente del tercer sector, como fuerza de oposici?n, de propuestas y de acci?n. Rechazar el entrar en espacios tan ambiguos, por su concepci?n o por sus resultados, es remitirse al discurso sobre la responsabilidad del estado y dejar el campo libre a quienes pretenden su desmantelamiento. En todo caso, el debate est? abierto, el campo de los TIC funciona como un laboratorio de estos desaf?os gubernativos. Este es hoy en d?a el curso de la discusi?n sobre los movimientos c?vicos tanto en los niveles local como internacional. Los movimientos que estar疣 presentes en G駭ova comprueban y reclaman: "Nuestro inter駸, tal como lo expresa el G8 deber?a tener un sentido ?nico, el de las grandes empresas y multinacionales cuyo acceso es privilegiado, mientras que la sociedad civil se halla excluida en su conjunto. Igual que en todas parte afirmamos firme y pac?ficamente nuestra voluntad de ser escuchados" La experiencia de la Dot force demuestra que no es suficiente ser invitado a una mesa de discusi?n para ser escuchado y entrar en un proceso de democracia participativa. Es necesario inventar todav?a las condiciones democr疸icas de dicho di疝ogo. Y VECAM habiendo elegido, luego de un amplio debate interno, participar en la Dot Force ha cumplido con una parte de su misi?n consistente en desbrozar esta cuesti?n. Ha sido una experiencia frustrante pero es de esperar que los movimientos c?vicos y sociales cosechen algunos frutos. Nota: Los documentos-clave vinculados al trabajo de la Dot Force est疣 disponibles en: www.vecam.org/dotforce.htm. La contribuci?n francesa del sector no lucrativo fue elaborada durante el transcurso de un debate cuyos archivos est疣 en : http://www.le-forum.net/wws/info/assoc-dotforce ______________________________ 4. G駭ova y las m?ltiples crisis de la globalizaci?n ____________________________________________________________ Walden Bello* El nombre de la ciudad de G駭ova est? asociado al nacimiento del capitalismo, hace seis siglos, en Europa. G駭ova puede convertirse tambi駭 en el s?mbolo de la crisis de la globalizaci?n provocada por las empresas capitalistas. El sitio que millares de contestatarios prev駭 organizar en ocasi?n de la cumbre anual del G8 en la tercera semana de julio en esta hist?rica ciudad italiana es emblem疸ico del estado de sitio mundial que rodea a las m疽 importantes instituciones de la econom?a global y de la pol?tica mundial. El contexto hist?rico de la reuni?n a realizarse, se funda en el hecho de que en poco m疽 de un decenio, el sistema capitalista mundial pas? del triunfo a la crisis. En momentos en que el mundo se halla al borde de una profunda recesi?n, ser?a ?til reflexionar sobre algunas de las principales dimensiones de esta hist?rica transici?n de crisis m?ltiples que destruyen el proyecto mundialista. El ?ltimo decenio del siglo XX comenz? con el hundimiento de las econom?as socialistas de Europa del Este y muchos discursos triunfalistas sobre el nacimiento de una nueva econom?a, conducida por el mercado y que sobrepasar?a las fronteras y se basar?an sobre el progreso tecnol?gico de la informaci?n. Los agentes-clave de esta nueva econom?a mundial ser?an las sociedades transnacionales que han sido pintadas como la suprema encarnaci?n de la libertad de mercado debido a su enorme capacidad para realizar la m疽 eficaz distribuci?n de tierras, trabajo, capital y tecnolog?a. A mediados del decenio naci? la Organizaci?n Mundial del Comercio (OMC) que fue definida por los partidarios de la organizaci?n como el arco legal e institucional de una nueva econom?a mundial. Al establecer un sistema global primordialmente basado en reglas fundamentadas en los principios del libre comercio, la OMC funcionar?a como catalizador del proceso econ?mico que producir?a mayor bienestar a mayor cantidad de personas. Ser?a el tercer pilar de ina santa trinidad que ser?a guardiana del nuevo orden econ?mico. Las otras dos son el FMI ( Fondo Monetario Internacional) promotor de los cada vez m疽 libres flujos de capital y el Banco Mundial supervisor de la transformaci?n de los pa?ses en v?as de desarrollo seg?n las reglas del libre mercado y gerente de su inegraci?n en la nueva econom?a mundial. LA MULTILATERALIDAD EN CRISIS Mientras los profetas de la mundializaci?n hablan de la de la obsolescencia de los estados-naci?n el principal beneficiario del nuevo orden global, despu駸 de la guerra fr?a, son los EEUU. Aunque supuestamente se trata de un instrumento para desarrollar un comercio m疽 libre, el m疽 importante acuerdo de la OMC cre? un monopolio para las empresas estadounidenses: el acuerdo sobre los Derechos de propiedad Intelectual relacionados con el comercio (TRIPs) que ha consolidado la confiscaci?n de las innovaciones "high-tech" de empresas como Microsoft e Intel mientras que el Acuerdo sobre Agricultura ha institucionalizado un sistema de competencia monop?lica entre los mercados que se encuentran entre los intereses agroalimentarios estadounidenses y la Uni?n europea. En cuanto a la crisis financiera asi疸ica ha devorado a los pa?ses considerados por las elites de negocio estadounidense como los m疽 temibles competidores por los EEUU. Washington mo intent? salvar a las econom?a asi疸icas poniendo en marcha pol?ticas expansionistas, por el contrario utiliz? al FMI para desmantelar las estructuras del capitalismo asi疸ico asistido por el estado, consider疣dolas como infranqueables barreras a la entrada de bienes y de inversiones de las sociedades transnacionales estadounidenses que desde hac?a muchos a?os reclamaban su parte en el "milagro asi疸ico" . Ha sido mucho menor la convicci?n por extender las pretendidas ventajas del libre comercio que el deseo de maximizar las ventajas geoecon?micas y geoestrat馮icas de los EEUU lo que ha impulsado a los EEUU a apoyar las pol?ticas del FMI, del BM y de la OMC. Como lo destaca Chalmer Jonson, la pol?tica oportunista de Washington durante la crisis financiera asi疸ica es un buen ejemplo de que luego de haber vencido a los fascistas y a los comunistas, los EEUU han intentado derrotar a sus ?ltimos rivales para lograr el dominio mundial: las naciones del Este asi疸ico que se beneficiaron con la guerra fr?a para enriquecerse. Lograr concretar sus intereses bajo pretextos de multilateralidad - las instituciones de Bret?n Woods, las Naciones Unidas o el G8 le han provisto un marco de liderazgo hegem?nico - ha sido la estrategia preferida por los EEUU en el per?odo de posguerra. Washington no ha dudado en actuar unilateralmente. Esto sucedi? la mayor?a delas veces en el transcurso de los a?os 90 con el fin de la incitaci?n a mantener conductas multilaterales impuestas por la competencia sovi騁ica. El uso instrumental de agencias multilaterales fue brutal en la ONU. Aunque utilizando a las NU para aislar a Irak, EEUU se rehus? a pagar sus contribuciones a dicho organismo con el pretexto de que no apoyaba totalmente su pol?tica. Por otra parte recurri? a otras instancias cuando no pudo obtener un acuerdo y ejerci? su voluntad sobre instituciones m疽 flexibles, como recurrir a la OTAN para cubrir los bombardeos en Yugoslavia durante el conflicto de Kosovo. El G8 (hasta ese momento G7, sin Rusia) naci? en los a?os 70 con la intenci?n de establecer un mecanismo de toma de decisiones m疽 multilateral que incluyera a los pa?ses de capitalismo m疽 avanzado, especialmente en materia econ?mica. Sin embargo, especialmente bajo la administraci?n de Georges W. Bush , Washinton se lanz? a caminos unilaterales que le crearon agudos conflictos con los dem疽 miembros sobre algunos temas candentes como el cambio clim疸ico, los misiles defensivos y la reconciliaci?n de las dos Coreas. El incumplimiento brutal de un acuerdo de dif?cil negociaci?n, el Protocolo de Kioto sobre el Cambio clim疸ico, marca un nuevo y extremo intento de conducta unilateral y su contribuci?n a la erosi?n de la alianza EEUU-UE, basada en la hegemon?a occidental, no debe ser subestimada. LA CRISIS DE LEGITIMIDAD. El acrecentado recurso de acudir al unilateralismo y a la imprudente manipulaci?n de los mecanismos multilaterales para acrecentar la hegemon?a de los EEUU es una de las mayores causas de la crisis de ilegitimidad que ha comenzado a manifestarse en el mundo desde fines de los 90. Pero la erosi?n del multilateralismo como causa de deslegitimaci?n se debi? al hecho de que evidentemente el sistema no pod?a mantener sus promesas. Muchos observadores consideraban des hac?a bastante tiempo que el sistema no pod?a crear riquezas para todos sino solamente su ilusi?n. Sin embargo la realidad del crecimiento de la pobreza global y de la desigualdad se hallaba neutralizada por las elevadas tasas de crecimiento y la prosperidad de algunos islotes de la econom?a global., como el Este asi疸ico en los 80, que fueron descritos como modelos de desarrollo inducidos por el mercado. Pero cuando las econom?a asi疸icas se hundieron en 1997, se pusieron de manifiesto las estupideces de la econom?a neoliberal. Las discusiones sobre la causa de la crisis financiera asi疸ica , de la que se dec?a " el capitalismo de los compa?eros" No pod?a ocultar que se trataba de la liberaci?n del capital especulativo de las imposiciones reglamentarias impuestas por el FMI lo que caus? el derrumbe del Asia. El FMI fue severamente criticado por haber impuesto programas draconianos a las econom?as asi疸icas, luego de las pol?ticas de crisis que aceleraron sobre todo la contracci?n de la econom?a, salvado a los bancos extranjeros y a las inversiones especulativas y reestructurado las econom?as "seg?n los principios estadounidenses". El papel del FMI en el Este asi疸ico puso en marcha el an疝isis de su participaci?n en la exigencia de ajustes estructurales en gran parte de Africa, del Sudeste asi疸ico y de Am駻ica del Sur durante el transcurso de los a?os 80 y por el hecho de que dichos programas exacerbaron, como en Asia, el estancamiento, incrementando las desigualdades y la pobreza. Actualmente esta incidencia ha sido por lo general comprendida, al punto de que el FMI, en un desesperado esfuerzo or exorcizar su reputaci?n, se sinti? en la necesidad de cambiar el nombre del programa de ajustes estructurales (ESAF) por el de Programa de crecimiento y de reducci?n de la pobreza an la reuni?n mundial anual del Banco Mundial- FMI en Washington en setiembre de 1999. La crisis financiera asi疸ica ha puesto sobre el tapete la legitimidad del FMI. En el caso de la OMC, el caso es a?n m疽 espectacular. En los ?ltimos cinco a?os del decenio, un creciente n?mero de pa?ses y de comunidades adhirieron a la OMC creyendo a una carta de negocios que sacraliza lo que el abogado de los consumidores Ralph Nader ha llamado el principio del "comercio ante todo", por sobre la justicia, la legalidad, el medio ambiente y todo lo que amamos. Muchos pa?ses en desarrollo han descubierto que adhiriendo a la OMC, han renunciado a su derecho a desarrollarse. Las corrientes del descontento y la oposici?n convergieron en las calles de Seattle y hacia los salones de reuni?n del Centro de los Congresos en Seattle en diciembre de 1999, para rechazar el tercer programa y desatar una severa crisis institucional de la que la instituci?n no se ha recuperado todav?a. El Banco Mundial bajo la direcci?n del australiano James Wolfenhson, pareci? encontrar un cabo que le permitiera escapar a los embates sufridos por estas sordas instituciones hasta que a principios del 2000, sufri? el inesperado ataque de la Comisi?n Meltzer. Desde que asumi? el comando de la instituci?n a mediados de los 90, Wolfensohn se las arregl? para desactivar las cr?ticas gracias a un h畸il trabajo de relaciones p?blicas y de sost駭 de organizaciones no gubernamentales. Pero cuando las cr?ticas fueron formuladas por gente de la izquierda de una Comisi?n del Congreso de los EEUU, el juego se le termin?. Esta comisi?n dirigida por el universitario conservador Alan Meltzer lleg? a la conclusi?n que los resultados del Banco en el cumplimiento de sus objetivos de eliminar la pobreza eran eran calamitosos y que era mejor confiar estas tareas a organizaciones regionales. No es de sorprender entonces que ante cr?ticas de la izquierda y la derecha, halla sido considerado por la ret?rica de las agencias multilaterales y de los gobiernos del G8 que son su sost駭. Por lo tanto la anulaci?n de la deuda, una nueva arquitectura financiera mundial y la reforma de las estructuras de decisi?n de la OMC y de las "gemelas " de Bretton Woods son los temas m疽 importantes alrededor de los que giran las promesas de cambio. Estas iniciativas se han visto en gran parte frustradas por la escasez de acciones concretas. La iniciativa de reforma m疽 importante, el proyecto del G8 de aliviar los servicios de las deudas externas a 41 pa?ses pobres muy endeudados (PPTE) solo logro reducir la deuna en 1000 millones de d?lares, desde que esta propuesta se puso en marcha en 1996. ソPuede ser una reducci?n el que solo haya bajado un 3% en cinco a?os? En materia de arquitectura financiera internacional discusiones serias sobre el control del capital especulativo, como el establecimiento de la Tasa Tobin, no ha sido abordadas. El FMI no reformado continua siendo el centro del "sistema de lucha contra incendios" Se ha incorporado una l?nea de cr馘itos prioritarios para usar en caso de crisis (y que ning?n pa?s quiere utilizar)y un Foro de Estabilidad Financiera sin poder y en el que tienen muy poca participaci?n los pa?ses en desarrollo, son las ?nicas innovaciones que generaron las crisis financieras asi疸ica, rusa y brasile?a durante los tres ?ltimos a?os. La reforma de las estructura de decisi?n de los organismos multilaterales que son las principales instituciones reglamentarias y gestionarias del capitalismo mundial actual deb?an ser la punta de lanza del G8. Peor la discusi?n sobre la democratizaci?n de la OMC, se ha estancado. El Director General Mike Moore dice que el sistema de "consenso" no transparente que desat? la reacci?n de los pa?ses en desarrollo en diciembre de 1998 en Seattle no es "negociable" Y en lo que respecta al FMI al BM ya no se discute sobre la reducci?n de los votos de los EEUU y de la UE a favor de aumentar los votos de los pa?ses en desarrollo, sin mencionar la feudal pr當tica de poner siempre a un europeo a la cabeza del Fondo y de un estadounidense en la del Banco. LAS SOCIEDADES EN LA MIRA A fines del ?ltimo decenio del siglo XX, hab?a, en s?ntesis desaparecido el triunfalismo y sido reemplazado por una crisis de legitimidad del orden multilateral. La crisis del sistema multilateral se tradujo en un creciente malestar relacionado con los principales protagonistas de la mundializaci?n: las sociedades capitalistas. Se conjugaron muchos factores que atrajeron la atenci?n sobre estas sociedades en los a?os 90 - los m疽 notorios las pr當ticas predatorias de Microsoft, los atentados al medio ambiente de la Shell, la irresponsabilidad de Monsanto y de Novartis en la promoci?n de organismos gen騁icamente modificados, la explotaci?n de la mano de obra barata por Nike y el ocultamiento a los consumidores por graves defecos en los productos por parte de Mitsubishi, Ford y Firestone. La sensaci?n de que se producen urgencias en el medio ambiente comienza a perfilarse a principios del siglo XXI y abarca a cada vez mayor cantidad de gente, la de la r疳ida fusi?n de casquetes glaciares probablemente atribuible al dios Petr?leo y a la continua promoci?n por parte de gigantescas automotrices de la civilizaci?n petrolera que destruye el medio ambiente y al proceso de incontrolado crecimiento conducido por las transnacionales (TNC) Ir?nicamente en los EEUU se produc?a el apogeo de la Nueva Econom?a mientras que la desconfianza hacia estas sociedades se hallaba en el pico m疽 alto desde decenios. De acuerdo con estudio de Business Week el 72% de los estadounidenses opinan que los negocios tienen demasiada influencia en sus vidas y la revits pone en guardia: "。Am駻ica de los negocios, ignoras estas tendencias a tu propio riesgo!" Algunos de los m疽 esclarecidos miembros de la elite mundial han tomado en serio estas advertencias y en su reuni?n anual en Davos, Suiza, decidieron elaborar una respuesta que ir?a m疽 all? de ser una estrategia de fracaso consistente en negar que la mundializaci?n conducida por las empresas crea enormes problemas y m疽 bien tender?a a promover una "globalizaci?n con compasi?n". Pero la tarea era demasiado grande, ya que fue quedando cada vez m疽 claro, que en un mercado mundial no reglamentado resulta cada vez m疽 dif?cil conciliar las exigencias de responsabilidad social con las de las ganancias. Lo mejor que "una globalizaci?n con conciencia" podr?a brindar, seg?n C. Fred Bergsten, conocido abogado de la mundializaci?n , ser?a un "sistema transitorio de redes de seguridad que ayudara a adaptarse a la deslocalizaci?n" y "permitiera a la gente beneficiarse con este fen?meno (la globalizaci?n) y por lo tanto antes que oponerse, apoyarlo" EL NUDO ESTRATノGICO La potencialidad de las sociedades es una dimensi?n de la sociedad global. Pero, y esto es una consecuencia, la potencia estrat馮ica se concentra en los EEUU. La potencia estrat馮ica, no puede ser reducida como en el marxismo ortodoxo, por el simple juego de la din疥ica del control social. Los EEUU no pueden ser reducidos a ser simples servidores del capital estadounidense. El Pent疊ono tiene su propia din疥ica y no podr?a comprenderse el papel de los EEUU en los Balcanes o su cambiante actitud frente a China como determinada por los intereses de sus empresas. En efecto, en Asia ha sido la extensi?n estrat馮ica y no el expansionismo de las empresas, el resorte de la pol?tica estadounidense, por lo menos hasta los a?os 80. Y en el caso de China, los deseos del capital estadounidense de explotar el mercado chino se encontr?, cada vez m疽, en oposici?n con las definiciones del Pent疊ono considerando a China como el Enemigo que debe ser r疳idamente decapitado antes que ayudado por las inversiones occidentales que podr?an transformarla en un enemigo mayor. Ciertamente el poder de las empresas y el de los estados no siempre act?an en sinton?a. Una vez dicho esto queda claro que los principales objetivos del estado guarnici?n transnacional estadounidense, firmemente implantado en el Este asi疸ico, Medio Oriente y Europa proyect疣dose al resto del globo, es mantener un orden mundial que asegure la supremac?a de los intereses econ?micos estadounidenses. El periodista del New York Times, Thomas Friedman, puede equivocarse sobre la menor influencia de la globalizaci?n pero el apunta con exactitud cuando afirma que: LA MANO ESCONDIDA DEL MERCADO NO TENDRチ JAMチS ノXITO SIN UN PUムO OCULTO. (continuar?) *Walden Bello es Director Ejecuivo de FOCUS IN THE GLOBAL SOUTH con sede en Tailandia ______________________________ 5. Noticias breves ____________________________________________________________ La cumbre de Bonn sobre cambio clim疸ico tira la toalla.- La Cumbre de Bonn sobre el cambio clim疸ico est? descartando pr當ticamente la ratificaci?n del Protocolo de Kioto para limitar la emisi?n por parte de los pa?ses industrializados de gases causantes del "efecto invernadero", y busca alcanzar acuerdos parciales que mitiguen el fracaso total de la reuni?n. Se han unido a las negociaciones los ministros de Medio Ambiente de los pa?ses participantes para salvar lo que puedan de Kioto, tras la negativa de EEUU, el principal contaminante, a ratificarlo y las reticencias subsiguientes de Canad?, Jap?n y Australia. Argentina: La Asamblea de Peque?os y Medianos Empresarios (APYME) afirma que el s駱timo ajuste econ?mico del gobierno de De la R?a cierra un c?rculo perverso que profundiza la crisis de las Pymes al cercenar la ya desesperante situaci?n de la mayor?a de los consumidores. La reducci?n de un 13 % en los sueldos de los empleados p?blicos y en las jubilaciones de m疽 de trescientos pesos y en los pagos a proveedores del Estado sumar? m疽 recesi?n a la recesi?n, empobreciendo a?n m疽 el deteriorado mercado interno. La entidad sostiene que el Estado y los Gobiernos provinciales deben exigir a los beneficiarios de la ?ltima d馗ada: compa??as adjudicatarias de las empresas p?blicas privatizadas, sector financiero y grupos m疽 concentrados de la econom?a, que aporten los fondos necesarios para financiar el d馭icit y reactivar la econom?a mediante la defensa de la producci?n nacional y una redistribuci?n m疽 equitativa de los ingresos. APYME adhiere a las acciones de protesta convocadas por las centrales de trabajadores y llama a los peque?os y medianos empresarios a participar junto a los sectores populares en el rechazo de la continuidad del ajuste permanente, origen de la desesperante situaci?n de las mayor?as. _______________________________________________ nettime-lat mailing list nettime-lat@nettime.org http://www.nettime.org/cgi-bin/mailman/listinfo/nettime-lat